Como ya es costumbre el América luchó y luchó hasta que salvó un punto, ante un Junior que en el segundo tiempo lo sorprendió. Sergio Galván marcó su tanto 218 y es el máximo artillero del torneo colombiano.
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Los ‘Rojos’ que contaron con un buen arranque y un primer tiempo destacado, se fueron adelante en el marcador con un tanto de Juan Camilo Angulo, a los 28 minutos, sorprendiendo a Didier Muñoz, quien nada pudo hacer ante el lanzamiento del lateral.
Así se fueron al descanso, pero al regreso el Junior salió mejor, con más decisión y a través del goleador Carlos Bacca sorprendió al arquero Alexis Viera en tres ocasiones, dos de las cuales entraron en el arco, para dejar en ventaja a los visitantes.
El primer gol de Bacca llegó a los 12 del segundo tiempo, con un remate cruzado para vencer a Viera, y ocho minutos después de nuevo Bacca tras habilitación de Paulo César Arango decretó el 1-2 en el ‘Pascual Guerrero’.
Pero faltaba más, los americanos no bajaron los brazos y a pesar de la expulsión de Juan Camilo Angulo, siguieron insistiendo hasta que Jaime Córdoba punteó un balón que rebotó en el piso y quedó en el aire para que Sergio Galván Rey de cabeza empatara el juego 2-2.
Era el tanto 218 del delantero colombo-argentino quien se convierte en el máximo artillero del fútbol colombiano. “La gloria y la honra son para Dios” fue el mensaje que exhibió en su pecho el goleador que también recibió la camisa con la 218 con la que haca historia.
Así se fueron al descanso, pero al regreso el Junior salió mejor, con más decisión y a través del goleador Carlos Bacca sorprendió al arquero Alexis Viera en tres ocasiones, dos de las cuales entraron en el arco, para dejar en ventaja a los visitantes.
El primer gol de Bacca llegó a los 12 del segundo tiempo, con un remate cruzado para vencer a Viera, y ocho minutos después de nuevo Bacca tras habilitación de Paulo César Arango decretó el 1-2 en el ‘Pascual Guerrero’.
Pero faltaba más, los americanos no bajaron los brazos y a pesar de la expulsión de Juan Camilo Angulo, siguieron insistiendo hasta que Jaime Córdoba punteó un balón que rebotó en el piso y quedó en el aire para que Sergio Galván Rey de cabeza empatara el juego 2-2.
Era el tanto 218 del delantero colombo-argentino quien se convierte en el máximo artillero del fútbol colombiano. “La gloria y la honra son para Dios” fue el mensaje que exhibió en su pecho el goleador que también recibió la camisa con la 218 con la que haca historia.
El Pais
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